¿Qué es una crisis nerviosa y qué problema de salud puede ocultar?

En ocasiones, las personas usan el término crisis nerviosa para describir una situación estresante en la que son temporalmente incapaces de funcionar con normalidad en la vida cotidiana. Pero ¿qué dicen los especialistas al respecto?

De acuerdo con la Clínica Mayo de los Estados Unidos, una crisis nerviosa no es un término médico ni indica una enfermedad mental específica, aunque aclara que eso no significa que sea una respuesta normal o sana al estrés, ya que lo que algunas personas llaman crisis nerviosa puede indicar un problema de salud mental que está oculto y necesita atención, como ansiedad o depresión.

Generalmente, lo que se considera que constituye una crisis nerviosa, varía de una cultura a otra, al igual que los signos, los cuales dependerán de una persona a otra.

Sin embargo, puede entenderse que, al referirse a una crisis nerviosa, una persona puede manifestar que ya no es capaz de funcionar con normalidad y presentar:

  • Sentimiento de estar fuera de control
  • Llanto
  • Sensación de calor en el cuerpo
  • Desmayo
  • Palpitaciones en el corazón
  • Temblores en el cuerpo

Además, podrían llevar a cabo acciones como:

  • Reportarse enfermo en el trabajo durante unos días o más tiempo.
  • Evitar los compromisos sociales y no presentarse a las citas.
  • Tener problemas para continuar con los hábitos de comer, dormir e higienizarse.

Aunque, existe una cantidad de otros comportamientos inusuales o disfuncionales que pueden considerarse signos o síntomas de una crisis nerviosa.

Por su parte, la organización Medical Health America señala que una crisis nerviosa o crisis de nervios puede desatarse a partir de un hecho aislado que ha sido provocado por un evento o información en particular, pero indica que en presentarlas constantemente, podría ser señal de una condición de salud mental como ansiedad generalizada o depresión.

Para reducir la incidencia de las crisis nerviosas se sugiere:

  • Reducir el consumo de cafeína
  • Reducir el estrés
  • Hacer más ejercicio
  • Implementar ejercicios de meditación y atención plena
  • Observar la dieta alimenticia
  • Dormir lo suficientemente
  • Aumentar los soportes sociales

Con información de UNOTV