El último cambio de horario en México ha llegado. El nuevo horario de invierno, llegará para quedarse, y una vez se haga el cambio, el horario de verano desaparecerá definitivamente.
Será la «ocasión final» en que se tenga que realizar un ajuste en los reloj, lo que significa que una vez hecha la modificación, habrá más luz natural durante la mañana, pero se oscurecerá el día más temprano.
A pesar de su eliminación para la mayoría del país, en algunas zonas un «horario estacional» seguirá vigente, por ejemplo, en los municipios que se ubican en la zona fronteriza con Estados Unidos, mismos que tienen una «integración laboral, social, cultural y económica» con el país.
Eso sí, no se cierra la opción de que estados y municipios puedan hacer nuevamente modificaciones en el horario, aunque para esto deben realizar una solicitud formal ante su propio Congreso, previa consulta a la población.
A diferencia del de verano, en esta ocasión toca atrasar el reloj una hora, y a pesar de que el momento exacto para hacerlo es el domingo 30 de octubre a las 2:00 am, se recomienda hacer la modificación desde el sábado 29 de octubre antes de ir a dormir.
Al atrasarse, la ventaja será que se aprovecharán mejor las horas de sueño, y al menos el día del cambio, se podrá dormir una hora más.
Entre las razones para eliminar el horario de verano, se encuentra que este cambio produce impactos negativos en la población, con afectaciones en su salud, bienestar y economía.
Además, a pesar de que durante mucho tiempo se mantuvo el argumento de que había un ahorro energético, de acuerdo con un informe de la Secretaría de Energía, se reveló que esta modificación de horario generó menos del 1% de ahorro en el país, lo que no aportó para mantener el cambio.
Fuente: Xataka